El mejor momento para hacer ejercicio: ¿Por la mañana o por la noche?
Cuando sienta la necesidad de un cambio en su vida y esté considerando introducir entrenamientos regulares, debe haber pensado en cómo incorporarlos a su horario diario. ¿Deberías elegir levantarte más temprano y hacer tu entrenamiento matutino, o es mejor dejarlo para la tarde o la noche?
Cada uno de nosotros se adaptará fácilmente a uno de los grupos: o eres madrugador y levantarte cuando amanece es algo natural para ti, o como un ave nocturna sientes una oleada adicional de energía por las tardes, lo que te permite trabajar hasta tarde en la noche.
Por lo tanto, vale la pena analizar su ritmo diario, modo de trabajo y deberes diarios, así como el tiempo de regeneración.
PROS Y CONTRAS DEL ENTRENAMIENTO MATUTINO
Hacer ejercicio temprano en la mañana puede ponerlo en un estado de ánimo perfecto para el día.
Añaden energía y te permiten disfrutar del día con tranquilidad mental, porque ya no tienes que pensar en cómo encontrar tiempo adicional para entrenar.
El cambio de planes de la tarde no te obligará a abandonar los entrenamientos.
Además, los ejercicios matutinos son muy buenos para las personas que quieren quemar grasa. De la noche a la mañana, su cuerpo utiliza el glucógeno que ha acumulado de sus comidas. El ejercicio matutino obliga al cuerpo a tomar energía del tejido adiposo almacenado.
Motivación al ejercicio: ¿cómo mantenerla?
Además, al comenzar el día con ejercicio, haces que tu metabolismo se acelere significativamente, protegiendo al cuerpo contra el almacenamiento innecesario de grasa, y estimulándolo a quemar calorías de manera más rápida y eficiente.
La desventaja de hacer ejercicios matutinos es el alto riesgo de lesiones. Después de una noche completa de descanso, los músculos y las articulaciones se atascan y la falta de un calentamiento adecuado puede ser fatal.
Desafortunadamente, entrenar desde el amanecer no es un buen momento para el entrenamiento de fuerza. Si quieres fortalecer tu cuerpo y desarrollar masa muscular, elige actividades de la tarde.
El momento perfecto para entrenar en el gimnasio
Al entrenar por la mañana, vale la pena echar un vistazo más de cerca a un factor más: el desayuno. ¿Se puede hacer el ejercicio con el estómago vacío? Tales ejercicios con el estómago vacío generan muchas reservas cuando son demasiado intensos o duran demasiado.
Si quieres despertar un poco tu cuerpo y limitarte a ejercicios de 30 minutos, entrenar en ayunas te permitirá quemar mucha más grasa.
Debe comer una comida rica en proteínas justo después de terminar. Si decide entrenar después de un desayuno ligero, se permitirá hacer más: el ejercicio puede ser más exigente y el tiempo de actividad en sí es mucho más largo.
PROS Y CONTRAS DEL ENTRENAMIENTO NOCTURNO
La investigación científica ha demostrado que los llamados el pico de resistencia es a las 4:00 p. m. – 7:00 p. m.
Por las noches, nuestro cuerpo se calienta después de un día de actividad, lo que hace que te ejercites de manera más eficiente y efectiva. Este es el mejor momento para el entrenamiento de resistencia.
Además, el entrenamiento vespertino es ideal para ejercicios que desarrollan masa muscular. El bajo nivel de cortisol permite una rápida recuperación y crecimiento muscular.
Es el cortisol el que tiene un impacto en la destrucción de las fibras musculares, por lo tanto, al elegir un entrenamiento tardío, puede notar un aumento significativo en la masa muscular.
Los ejercicios nocturnos pueden convertirse en una excelente manera de aliviar la tensión y el estrés después de un largo día de trabajo.
Gracias a esto, estarás relajado, lo que a su vez se traduce en una mejor calidad de sueño. Sin embargo, recuerda no excederte en la intensidad del entrenamiento, ya que puede tener efectos opuestos.
Después de tal esfuerzo, estará lleno de energía y la transición a un estado de descanso puede ser difícil.
Los entrenamientos en la segunda parte del día también tienen desventajas. A menudo, después del trabajo, una persona está tan cansada que no puede hacer ejercicio.
Entonces, puede suceder que comiences a saltarte los entrenamientos nocturnos por una dulce pereza en tu programa favorito.
Independientemente de la hora del día que elija, recuerde que la regularidad es la clave del éxito. Es el entrenamiento regular el que trae los mejores resultados, tanto en términos de desarrollo corporal como de bienestar.
Con el tiempo, tu cuerpo se programará a sí mismo para una hora determinada, ¡y entrenar se convertirá en puro placer!